Diario de un piloto… no todo es color de rosa

Hoy retomamos una de las secciones que más éxito tiene en el blog, se trata del Diario de un piloto de José Terré, pero han habido algunos problemas por el camino que el propio José os contará a continuación, pero como siempre los luchadores sacan fuerzas de donde sea para seguir peleando y tirando hacía delante, con este nuevo artículo os mostrará que no es todo de color de rosa en el mundo de las motos.

No te pierdas nada y apunta bien los consejos que la experiencia te muestra, siempre viene bien descubrir que siempre hay dificultades para seguir peleando por los sueños y los objetivos, pero que paso a paso se puede ir hacía delante.

En los negocios de la vida, no es la fe la que salva, sino la desconfianza.

Es cierto que en muchos momentos del diario me he tenido que reprimir muchísimo para no desahogarme como quería, pero por primera vez, y a partir de ahora siempre será así, contare las cosas tal y como son. Lo que voy a contar no es sólo una mala experiencia vivida, es un aviso y una advertencia para que vigiléis donde metéis vuestro dinero y sobretodo vuestras ilusiones, repito, no voy a dar mi opinión sobre lo acontecido, voy a contar los hechos tal cual. Las conclusiones sacadlas vosotros mismos.

Iniciar un nuevo proyecto con ilusión y exceso de confianza en los demás te lleva a cometer errores. El 2012 ha sido un año muy duro para mí, pero me ha enseñado algo importante: no te puedes fiar de nadie. No quiero que entendáis mi relato como un cúmulo de rencor hacia la empresa/gente que ha estado implicada, sólo quiero que aprendáis de mis errores.

Aún recuerdo cuando empezamos a ponernos en contacto con diferentes concesionarios Triumph para llevar a cabo nuestro proyecto, negociar precios y acuerdos comerciales, al final las mejores condiciones fueron con Quality Bike y G.M., todo era perfecto, no había ni un ápice de negatividad, todo era simplemente perfecto.

Desde el minuto 1, G.M sabía a qué iba destinada esa moto(competición/circuito) llegamos a unos acuerdos de publicidad, evidentemente teníamos que llevar su logo en la moto, resaltar la marca Triumph en las fibras, técnicos y mecánicos del equipo ir con camisas de Quality Bike. De todas formas nosotros preguntamos si a pesar del uso en circuito la moto iba a tener garantía, la respuesta fue tajante, «claro que si no os preocupéis!». Siempre y cuando montásemos material oficial no habría problema.

¿Papeles firmados sobre eso? Ninguno. Primer y gravísimo error nuestro: todo acuerdos verbales… Está claro que para ser un buen comercial no hay que tener escrúpulos. Di que si a todo hasta que tengas la venta y después ya veremos. De todas formas quisimos hacer un buen rodaje, matriculamos la moto, pagamos el seguro e hicimos los 1600 km que tal y como dice el manual. Por cierto, hacer el rodaje en pleno invierno es lo peor, fue una paliza brutal. Entonces es cuando vi algunas cosillas (para mí no muy normales), incluso saliendo con amigos me preguntaban sobre esas anomalías, así que me acerque al concesionario a preguntarles, ya que durante el rodaje, la Daytona se calentaba en exceso (a menos de 8.000 rpm subía por encima de la temperatura recomendada en el manual) y el motor siempre estaba lleno de manchas blancas provocadas por fugas de agua. La respuesta de los mecánicos de Quality fue que las Triumph trabajaban a una temperatura alta y que lo del agua sería un problema del tapón del depósito, que se abriría solo y de ahí que la moto estuviera manchada pero que estuviera tranquilo… ¿Papeles de por medio? Ninguno… Sólo fue una visita de 15 minutos y por entonces la moto tenía 800 km.

Seguí haciendo el pesado y frío rodaje con el persistente problema hasta la 1ª revisión. Volvieron a revisar el problema de la perdida de agua, y según el gerente, aunque los mecánicos verificaron que todo estaba bien, informaron a fábrica.

Bueno rodaje hecho por fin!!! 1600km!!!!

Llegados a este punto hicimos el encargo a G.M de todas las piezas que queríamos equipar. Además, para intentar zanjar el problema de pérdida de agua pensamos en cambiar la junta de culata (por si el defecto venía de una imperfección en la de serie) por una de 0.65 del kit de competición. En el kit de fábrica hay otras mucho más finas creo recordar que hasta 0.50 o 0.55 pero como nuestra intención no era comprimir el motor, me recomendaron la de 0.65 ya que no compromete el motor para nada, (la de serie es de 0.70) así que el cambio fue mínimo. Como apunte os diré otro gran inconveniente de comprar una Triumph, es que para comprar material de competición tienes que pasar por fabrica si o sí; tienen exclusividad con algunas marcas y muchas piezas sólo las encuentras en el kit oficial. Lo que venden es de buena calidad, pero los precios se multiplican x2 (sin exagerar).

Le planteé a G.M si esas piezas, tubo, junta, amortiguador las podía montar en mi taller de confianza de toda la vida Eduard Catalá (Suzuki Catalá) ya que en Quality Bike nos comentaron que no tenían experiencia ni medidas suficientes para preparar una moto de competición, y la verdad para mí llevar la moto a Barcelona también era un engorro.

¿Cómo pude ser tan ingenuo? por no decir tonto…

Pues dicho y hecho llevamos la moto a Suzuki Catalá, a la espera de que llegaran las piezas de Triumph. La piezas llegaron fuimos a buscarlas a Quality Bike y de allí a Català, una vez sacada la culata para montar la junta. Catalá me llamó porque había visto un defecto en la junta, estaba manchada, los conductos internos de la junta tenían manchas de agua, de ahí que perdiera agua, (tendría alguna imperfección y la presión hacia que el tapón del depósito de agua se abriera) me enseño la culata y a simple vista no estaba mal, no tenia arañazos ni tenía ningún desperfecto, así que cabía la posibilidad de que fuera un defecto de la junta, en ese momento la llevamos a Quality Bike, donde el jefe de taller el Sr J.C. me atendió perfectamente, vio la junta y se puso en contacto con Català para informarle que esa pérdida entraba dentro de los parámetros normales, resumiendo… todo seguía siendo normal… sus palabras fueron «entra todo dentro de la normalidad y tolerancia».

Yo no soy mecánico pero ¿es normal que una moto pierda por una junta?

A pesar de eso sus palabras fueron tranquilizadoras y en conversación telefónica tanto a Catalá como a mí nos dijo que si el problema persistía o iba a mas (que según el también era posible) no habría ningún problema en que entrara en garantía. Después de prepararla, entrenar e ir a Cheste dónde hice mi primera carrera, llevamos la moto a Quality Bike dónde estuvo expuesta un par de semanas antes de la carrera de Jerez, incluso estuvieron presentes en una rodada que hicieron junto con Sportmoto Team, dónde se pudo probar algunos modelos Triumph y había expuestas varias motos. Todo era idílico!

A pesar de cambiar la junta y poner la nueva, el problema de las fugas persistía. Además ahora empezaba a “sudar” algo de aceite. Así que como nos dijeron en Quality les informamos del problema pero aquí la actitud de todos había cambiado, parecía que todo estuviera estudiado. En ese momento se nos comunica que la moto al entrar en circuito había perdido totalmente la garantía (sólo os advierto que evitéis poner fotos en el facebook, informar a Quality Bije o a Triumph España que vuestra moto ha entrado en circuito porque automáticamente pierde la garantía, eso lo digo porque el faceook es un mundo muy muy pequeño…).

Después de días y días discutiendo, se nos informa que a pesar de la conversación telefónica y verbal en las que se daba el consentimiento (como siempre nada escrito) de que esa junta la montara un taller fuera de la red de concesionarios Triumph, pues que la moto y todas las piezas perdían la garantía, sin dejar de mencionar el factor del circuito. Aquí ya empiezo a preguntarme cosas… ¿porqué no se nos informó desde un principio, sabiendo la finalidad de la moto, que perdía la garantía? Supongo que perderían una venta claro…

Insistimos una y otra vez que ese problema venia de cuando la moto estaba de serie y la revisión la llevaban ellos, que informamos persistentemente del problema y que se comprometieron a repararla si el problema persistía. Pero sus palabras sólo se limitaban a decir que estaba fuera de garantía… Nos daban la razón en que se detectó un problema durante el rodaje, pero que ahora ya no podían hacer nada, que Triumph España les negaba la garantía. Era como hablar con una pared.

Pronto la segunda parte de esta desilusión.

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