Consejos para conducir tu moto de noche

El conducir de noche siempre es más complicado, así que toca ir bien protegido y con todos los sentidos activados, anota estos consejos y disfruta de la moto al 100% en cualquier situación.

Es evidente que de noche tenemos menos visibilidad y menos percepción del entorno, así que hay que prestar mucha atención a los puntos de luz que aparecen ante nosotros o vemos en el retrovisor. También está claro que tenemos que aumentar las precauciones, ya que esta condición de visibilidad reducida es esencial para que extrememos todas nuestras precauciones. Empezamos por reducir la velocidad, con el objetivo de aumentar nuestras posibilidades de reaccionar a tiempo en el caso de que aparezca cualquier imprevisto delante de nosotros de manera repentina.

Debemos revisar el alumbrado de nuestras máquinas, por las características propias de la moto, no es un vehículo que suela disponer de un alumbrado amplio y generoso. Por eso, debemos tenerlos en las mejores condiciones. No olvidemos las luces traseras, ya que también es importante ser vistos, y los intermitentes para indicar nuestras intenciones de giro o cambios de carril.

Otro punto a tener en cuenta es recomendable vestir ropa fluorescente, como chaquetas, chalecos específicos o incluso adhesivos para el casco pensados para la conducción en baja visibilidad. El resto de conductores no podrán decir que no te han visto. También recomendamos el usar casco con visera transparente durante la noche.

Por la noche es más difícil percibir los obstáculos o los baches que hay en el suelo. Por eso, es recomendable circular por la parte central de tu carril, donde suele haber menor probabilidad de encontrarte con baches o suciedad que cerca del arcén e intentar prestar atención por dónde vamos a pisar.

El estado de los neumáticos de la moto se hace indudablemente crucial para que tu circulación en moto por la noche sea segura. Revisa que no se haya llegado a los testigos de desgaste y que la presión de los neumáticos sea la recomendada por el fabricante para que no tengas ningún susto.

Y por supuesto, antes de viajes largos toca ir descansados. Además, debes tener en cuenta realizar paradas cada 2 horas para que tu cuerpo descanse lo suficiente. Esta situación se agrava por la noche, ya que con la oscuridad, el cuerpo se relaja aún más y es más probable la aparición de la somnolencia. Ante cualquier atisbo de fatiga, haz una parada.

Fuente: Continental

Seguridad #neumaticos