KiloWatios por favor, QVR VRONE
Con la mente puesta en la ciudad, pero con la versatilidad que ofrece poder usarla en carretera, llega a nuestro mercado la QVR VRONE, otra posibilidad más en el mundo del mañana, las motocicletas eléctricas.
El mundo avanza y cada vez son más las eléctricas que aparecen, también son más las marcas que se orientan hacia éste sector, y las que no lo hacen ya seguro que seguirán ésta dirección con los años, es que el mundo del scooter y la combustión tiene los días contados. La energía limpia en los trayectos de ciudad va a pasar de ser una opción a una necesidad, sobre todo en las grandes urbes donde los niveles de polución ya son demasiado elevados.
En potencia es equivalente a una moto de 125 cc, por ello como hemos dicho puede ser usada en carretera si fuera necesario, eso sí, no es su mejor escenario. Puede alcanzar velocidades de 120 Km/h, en marcador según comentan algunos probadores, aunque por otra parte declarado en la ficha del vehículo son 100 Km/h de velocidad punta.
Sus puntos fuertes por excelencia son, por una parte su autonomía, que gracias a sus baterías LiPo 74V 40Ah, que permiten 1.000 ciclos de carga, es de 70 a 100 kilómetros, en función de cual de los dos modos de motor que tiene, de lo que hablaremos más adelante, esté seleccionado. Por otra parte, el reducido tiempo de recarga, 4 horas si queremos una carga complete. Opcionalmente podemos comprar un cargador rápido que lo hará en alrededor de 2 horas.
Personalmente son las cosas que más me han llamado la atención pero tiene muchas más características. La calidad de las suspensiones es muy buena, horquillas telescópicas convencionales en la parte delantera y para la zona trasera dos amortiguadores. Tampoco se queda atrás el sistema de frenado que es bastante potente, está conformado por dos discos de 220 milímetros de diámetro, uno delante y otro detrás, y sus correspondientes pinzas, en éste caso AJP monopistón.
Hablando un poco de su motor, está incluido en el basculante y da 11,5 CV, aunque habrá que empezar a acostumbrarse a leer este dato en KW, son 8,5. La visión de los que han podido subirse en ella es que al principio pierde algo de salida con respecto a sus equivalentes en combustión, pero es a partir de 50 Km/h donde tiene un tirón espectacular, teniendo muy buenas recuperaciones.
Los dos modos de motor son uno económico y otro full power, el primero limita la velocidad máxima a 50 Km/h, es ideal para ciudad aumentando la autonomía. Para cambiar entre modos se utiliza el botón rojo, que en otra moto sería el de desconexión del sistema eléctrico.
El espacio que tiene bajo el asiento es para un casco tipo jet y pequeño, la verdad en éste tipo de motos todavía éste es un tema por mejorar, las baterías ocupan mucho sitio y no se pueden hacer maravillas.
Su seña de idéntidad son sus faros sin lugar a dudas, dos esferas que recuerdan a una bombilla antigua.
El conjunto pesa 140 kilogramos, y al tener las baterías en la parte de abajo se hace muy fácil de conducir. Su precio es de 7.000 euros o 6.200 euros si conseguís la subvención del Plan Movele.
Fuente | SoloMoto, Quantya.es