Luis Salom: «La Moto3 era fácil de pilotar, Moto2 es un mundo distinto»
El Mundial de Moto2 está a punto de arrancar, la temporada 2014 espera el inicio en Qatar el próximo 23 de marzo, mientras Luis Salom hace balance del largo parón invernal y analiza en qué punto se encuentra su adaptación a la nueva categoría, en la que se ha encontrado una moto más grande, potente y pesada.
Arropado por su nuevo equipo, el Team Pons HP 40, el mallorquín ha aprovechado al máximo el invierno para trabajar en la preparación de la temporada, tanto dentro como fuera de los circuitos. Un esfuerzo que se ha reflejado en el paso adelante de Salom en estos últimos test de la pretemporada 2014, cuando sólo falta una semana para el arranque del Campeonato del Mundo de Moto2.
¿Cómo se está desarrollando este último test oficial en Jerez?
Estoy muy contento, porque hasta ahora, en la mayoría de las sesiones he estado entre los tres y cinco primeros. Estoy manteniendo un ritmo siempre muy constante y mis tiempos vuelta por vuelta no varían. Desde el martes he rodado muchas veces en 1 minuto y 42 segundos, y creo que tengo que estar contento. A pesar de la caída del segundo día, que me condicionó un poco, he sido capaz de volver a rodar en tiempos buenos, en 1’42. Creo que podría haber ido un poco más rápido, pero realmente estoy muy contento con el ritmo que tengo. Las sensaciones con la moto son muy buenas, cada día me siento mejor. Ahora nos falta dar ese paso para lograr una vuelta rápida.
Con el inicio de temporada a la vuelta de la esquina, ¿qué balance haces de esta pretemporada?
La verdad es que la pretemporada ha sido buena, pero quizás no tanto como lo que se ha visto en Jerez. En los anteriores test no me había encontrado tan a gusto, no me adaptaba a la moto. Estoy contento con el punto que hemos alcanzado, pero creo que todavía no estoy completamente acoplado. Moto y piloto todavía no somos uno, pero también podemos verlo por la parte positiva, y es que todavía tengo margen de mejora.
¿Cuáles son los objetivos para 2014?
El objetivo de esta temporada pasa por mejorar cada vez que me suba la moto, nunca estancarme ni ir hacia atrás. Paso a paso intentaremos ir mejorando, avanzando progresivamente.
¿Te has marcado algún hito? ¿Podio? ¿Victoria?
No, porque eso viene detrás de un trabajo, así que primero se tiene que hacer el trabajo y luego ya se pensará en eso.
¿Qué aspectos de la moto o de ti mismo puedes mejorar de cara a la primera carrera?
No falta mucho. Tenemos que acabar de pulir algunos pequeños detalles para que me sienta más acoplado a la moto y entonces estaremos preparados para Qatar.
¿Has tenido que trabajar más el físico este invierno para dominar una moto más pesada?
Sí, ¡bastante! He tenido que coger peso durante todo el invierno y me ha costado, porque mi constitución física es la que es. He ganado 4 kilos y todavía falta subir alguno más, pero estoy contento por el nivel en el que estoy, bastante mejor que el año pasado.
¿Cómo te encuentras de la operación de la mano derecha a la que te sometiste en enero?
Ha mejorado mucho y se nota. En 2011 me fracturé el radio y dos metacarpianos en una caída en la República Checa y con la caída del año pasado en Francia, me resentí. La Moto2 requiere más fuerza, así que en los primeros entrenamientos fue difícil, pero ya estoy prácticamente recuperado.
¿Ha sido muy diferente tu trabajo de esta pretemporada respecto a inviernos anteriores?
Sí, totalmente; porque necesitaba adaptarme a una moto más grande, de mayor peso, con un motor de 600cc, neumáticos más anchos… Todo esto requiere mucho trabajo, porque la Moto3 era una moto muy ligera, con un solo cilindro, neumáticos muy estrechos, muy fácil de pilotar… Moto2 es un mundo totalmente distinto, es una moto complicada. Así que he estado por varios circuitos de toda la península, intentando rodar mucho con una moto grande. Este invierno casi no he estado en casa, he estado entrenando mucho y los días que no podía rodar con la moto, aprovechaba para prepararme físicamente, porque era necesario adaptar también mi cuerpo.
Este año compartes box con Maverick Viñales, uno de tus máximos rivales del año pasado. ¿Qué te aporta?
Es un piloto muy rápido y realmente es bueno tener un piloto del nivel de Maverick en el box, porque siempre puedo aprender y mejorar.
¿Qué diferencias hay entre el Luis Salom de hoy y el de hace un año?
Es muy diferente, porque el año pasado yo tenía clarísimo que, pasara lo que pasara, sería mi última temporada en Moto3. Además, para mí únicamente valía una cosa, ir a por todas. Es lo que hice y a pesar de la mala suerte que tuve al final, cuando en Japón me tiraron y en Valencia me caí, creo que fue una temporada de 10. Ganar 7 carreras y hacer 13 podios es un objetivo que evidentemente es muy distinto del de este año; ahora lo que quiero es aprender y avanzar.
¿Quiénes serán tus rivales esta temporada?
Yo creo que me tengo que concentrar más en mí mismo que en el resto, porque son tantos los pilotos que hay en esta categoría y tan poca la diferencia entre unos y otros, que lo importante es centrarse en tu propio trabajo y hacer bien las cosas.
¿Cómo ves tu antigua categoría? ¿Te atreverías a hacer algún pronóstico?
Mirando un poco los tiempos, Miller está yendo muy rápido, también Fenati… Siempre ha sido una categoría muy abierta y hay muchos que pueden marcar la diferencia. También espero que Álex Rins pueda hacerlo bien, porque después de la temporada que hizo el año pasado, realmente se lo merece.
Te vemos más activo este año en las redes sociales, ¿qué ha cambiado?
Sí, siempre es bonito tener un canal directo con todos los aficionados, y realmente ves que lo aprecian y lo agradecen. Me gusta interactuar, es divertido y ahora incluso voy a lanzarme con Instagram. Además estoy renovando por completo mi web y pronto la estrenaremos.
El año pasado te regalaron el segundo perro, ¿este año toca el tercero?
Pues sí, este año va a llegar el tercero y me lo tiene que regalar uno de mis patrocinadores personales [Centro de Nutrición Canina], porque me lo han prometido. Es un perro muy bonito, un mastín tibetano, y me hace mucha ilusión.
Fuente | Luis Salom press